miércoles, 6 de junio de 2012

Tristes Marcianos que mueren de amor


Hoy ha muerto Ray Bradbury.
Es curioso, porque hoy mismo, antes de conocer la noticia, recordé un pasaje de, para el que escribe, su mejor obra.
   Hablo de "Crónicas Marcianas". Nunca, extrañamente se ha llevado al cine, pero se hizo una miniserie para televisión que no hacía justicia a la novela.


   Hay un capítulo en concreto, que, a pesar de no ser el más espectacular del libro, siempre me pareció el mas interesante.
   Creo que se titulaba "El Marciano".


   Resulta que los marcianos se habían casi extinguido por culpa de la colonización humana, pero aún quedaban algunos vivos escondidos en montañas y viejas ciudades abandonadas.
   Y también resulta, y esto es lo apasionante, que los marcianos tenían la capacidad de transformarse, materializando los pensamientos de la persona que tenían delante.


Pues bien.
   Este marciano en concreto sobrevivía entre los humanos de esta forma.
   Si alguien había perdido a su hijo, él se transformaba en su hijo, satisfaciendo así la necesidad del humano, y consiguiendo a cambio cuidados, protección y... sí, también amor.


   El marciano olvidó quien era realmente, transformándose sin parar en los que los demás querían que fuera.


   Creo que nuestro planeta ha sido invadido por marcianos. Por todos lados veo personas sin autoestima, que se convierten en los que la persona de turno necesita. Personas vacías, rellenas de... la ilusión del otro.


   Marcianos que en apenas tres meses usan el dónde dije digo digo Diego.
Tan necesitados de ser aceptados que se autoengañan a sí mismos y engañan a las personas que les rodean, apartando de sus vidas a quienes les aman.
   Personas que se acuestan con quien habían puesto a parir hace apenas un par de meses.
   Personas que hoy abrazan a los que no soportaban ayer.


   Es realmente un capítulo triste, el más triste de esa novela. 
De esa novela, de esta película... 


...mejor no la lean.