miércoles, 13 de marzo de 2013

Un puto corto canario en la corte del Festival de Lanzarote

   
   Que hacer cine en Canarias es más dificil que en la Península es algo que sabe cualquier tonto, pero por si hay alguien que es mas tonto aún, lo volveremos a explicar.

   Por ejemplo, cuando rodamos "Los Pechos de Paula" en 2009, necesitábamos el vestuario acorde con la ambientación del siglo XIX.
   Intentamos buscarlo aquí, en Las Palmas y en Tenerife, y sólo conseguimos retales y piezas sueltas, algunas anacrónicas entre sí.
   Así que me pillé un vuelo a Madrid, me planté en Cornejo con 1000 euracos y alquilé todo el vestuario que necesitábamos.
  Luego hubo que enviarlo desde Madrid a Canarias, dos grandes cajas que pagaron sobrepeso en el aeropuerto etc etc.

   Si yo hubiera vivido en Madrid, me hubiera ahorrado el avión, los gastos de trasporte, los sobrepesos.
   Joder, y si hubiera vivido en Toledo o en Zaragoza me hubiera bastado con pillar el coche...

   ¿Está claro el ejemplo? Porque tengo más... ¿no hace falta? pues vale...

   Por eso, y por otras razones, los festivales de cine de Canarias solían contar con una sección canaria donde los trabajos canarios encontraban su espacio a modo de discriminación positiva.
   Discrminación positiva que no es tal en realidad, ya que otros festivales de la Península, de zonas no periféricas y por lo tanto no discriminadas, también mantenían en su programación secciones autóctonas.

   Uno de esos festivales canarios era el de Lanzarote, al que yo mismo alabé su política en un ya lejano post en este mismo blog, y que se había convertido en un importante referente de la cinematografía corta canaria, al ser uno de los pocos supervivientes tras la "muerte por chocolate" del Festivalito, Las Américas, Maspalomas etc etc.

   Este año, el festival anunció que se "unificaban" las secciones canaria y nacional.
¿Por qué? Buena pregunta.
   Algunas voces alegaban la falta de presupuesto para dar dos premios en vez de uno, y otras, extraoficiales, llegaron a declarar que "la sección canaria no tenía nivel" (tócate los pies mihelmano).

   Hoy han anunciado al fin la lista de los seleccionados y resulta que no encontramos ni un sólo título en la sección "canaria-nacional-unificada y polivalente" que se pueda considerar cine canario.
   Sí, está un tal "Green card black rice" de Juan Carlos Falcón, pero por lo que veo está rodado fuera y en inglés. Y no sé si se me habrá colado algún otro; creo que "el chico del 3B" es de Centrífuga Producciones, pero podríamos sentarnos a discutir si es esto suficiente como para considerar "canaria-nacional" a la sección.
La pregunta es_ ¿Ha salido perjudicado el corto canario con la unificación de las secciones?-
   Y la otra pregunta es: ¿Está la situación audiovisual aquí como para ir perjudicando al corto canario?

   Muchos pensábamos que de ser cierto el argumento económico a la hora de unir las dos secciones, se respetaría una cuota de trabajos canarios dentro de la sección. Si se trataba de seleccionar 30 cortos, que al menos 10 fueran hechos aquí.
Pero va a ser que no...
   Va a ser que lo que interesa es llenar la sala, con trabajos de mas recorrido, de mas nombre, para justificar los presupuestos estatales.

   O no. O a lo mejor va a ser verdad eso de que el cine canario no tiene nivel... pero si fuera así... ¿cómo se explican que esto, "dos tomates y dos destinos" sí esté este año seleccionado... ¿va a ser porque es de Joaquín Reyes y el alomodovariano Carlos Areces?...
¿Es éste el nivel del que hablan? ¿éste sí tiene nivel?

   Claro que sí, vamos a promocionar nuestra cultura, proteger a nustros creadores, para así algún día crear algo parecido a una industria... ah que no...

   Como decimos en Canarias... arráyate un millo, Festival de Lanazarote...